Capricornio - un símbolo incomprendido (pt. 1)


He escrito en este y otros sitios ya algunos artículos repasando mis apuntes y reflexiones sobre los símbolos zodiacales, desde el punto de vista simbólico y arquetípico en el sentido de la psicología jungiana. Este enfoque lo he aprendido con el libro del psicólogo neerlandés Manfred van Doorn "Universal Man". Aquí espero poder continuar con mis últimas reflexiones acerca de uno de estos símbolos, quizás uno de los más incomprendidos.

Capricornio es un símbolo muy importante en el camino de vida que el zodiaco representa en la vida psicológica de cada uno de nosotros. Capricornio representa tradicionalmente a los padres, al orden, la ley, la materialidad, y por esta razón las limitaciones. Pero hay muchos puntos que no se menciona y que con algo de profundizaciones encontraríamos.

Capricornio es un símbolo altamente social. Pero no es el amigo sociable. Al contrario, Capricornio representa una autoridad que la sociedad le transfiere a algo o alguien. Hay una transferencia de energía social en la psicología capricorniana, la cual mueve al individuo a tomar una postura. Esta postura tiene dos caminos que ya explicaré adelante. 

Primeramente, veamos el símbolo de Capricornio: una cabra y una cola de sirena o pez. Este símbolo es muy enigmático y siempre se asume que es monotemático. Como una especie de monoteísmo. No. Es dual, y mucho. Incluso yo diría que es trinitario, pero eso lo podría evaluar mucho más después.

La primera parte que analizaré es la parte inferior del símbolo gráfico: la cola de sirena. Las sirenas son seres mitológicos que encantan y asustan. Tienen tanto fama buena como mala. Y eso ya dice algo. También el pez nos recuerda a Piscis y a las masas, a los gentíos sociales. Pez también habla de pescado y su cognato PECADO. Aquí es donde la transferencia de energía sucede. El pecado social, falencias, fallas y errores del grupo en el que vive empieza a disgustar al individuo, siente que no hay dignidad ni mejora posible. Los cantos de sirena que mantienen a los demás embriagados y conformes en la masa de gente (¡dormidos!) no son para él, y se tiene que alejar. Entonces empieza la otra parte del símbolo: la cabra.

La cabra es un animal tosco y hecho a las dificultades de la naturaleza. A pesar de esas dificultades, la cabra logra sobrevivir, por su tenacidad y por su sabiduría austera. Y no solo logra sobrevivir, logra llegar alto, muy alto, a sitios que otros no logran llegar. El individuo que se ha separado de la sociedad por los cantos de sirena (murmuraciones, tentaciones, maledicencias) toma la dura decisión de subir, de elevarse por sobre eso y superarse. Se supera en principio por sí mismo. Pero en algún momento cae en cuenta que la energía que lo llevó a su camino de ascenso viene de su grupo, y entonces regresa, después de una especie de exilio, con cierta autoridad a su grupo social para cambiarla. 

(Continuará)

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